Uno de los objetivos fundamentales del trabajo a nivel local que llevan a cabo los municipios es garantizar el bienestar y un entorno de vida agradable para los residentes, esforzándose por satisfacer necesidades esenciales como la limpieza, el transporte, la salud y un medio ambiente saludable.
El objetivo último de la función del municipio sigue siendo salvaguardar la dignidad de los residentes en su territorio, y su misión debe estar en consonancia con los derechos humanos fundamentales, como la dignidad humana y todos los derechos que se derivan de ella, a saber, el acceso a todos los servicios administrativos básicos, el derecho a una vida sana y digna y el respeto de todos los derechos asociados.
El respeto de los derechos humanos y el trabajo para consagrarlo a nivel local es un indicador clave de la eficacia y la viabilidad de la labor municipal. De hecho, las actividades públicas, ya sean nacionales o, especialmente, locales, solo pueden ser creíbles y eficaces si se respetan y aplican plenamente los derechos universales de los seres humanos.
La importancia que se concede a los ámbitos tradicionales de la acción local, ejercida por los municipios de todo el mundo a través de los servicios de higiene, transporte, educación y salud, carece de sentido si el objetivo último no es defender la dignidad de la persona, la familia y la comunidad local en su conjunto.
Por lo tanto, cualquier estrategia de acción local y, en particular, municipal, carece de valor real si no integra un enfoque basado en los derechos humanos, independientemente de la afiliación, las creencias o la orientación ideológica de quienes participan en la labor municipal.
Como autoridad local, el municipio se compromete a promover los derechos humanos de la ciudadanía y a satisfacer todas sus necesidades: un entorno de vida agradable, un medio ambiente saludable y una vivienda digna.
Es a partir de esta convicción que la ciudad de Sfax y su consejo municipal, en coordinación con el resto de los actores locales y en particular la sociedad civil, han trabajado para reforzar el enfoque de los derechos humanos en su dimensión universal e incluirlo en sus estrategias y políticas locales desde su inauguración en mayo de 2018. Esta preocupación se ha materializado especialmente con el estallido de la pandemia de la COVID-19, afectando de manera particular al sector social más vulnerable y frágil: las personas inmigrantes y refugiadas. Estas han encontrado en el municipio y en las asociaciones civiles activas en el ámbito de los derechos humanos un apoyo fundamental para hacer frente a la difícil situación de pobreza derivada de la pérdida de empleo y el desempleo forzoso generado por la crisis sanitaria.
Por todas estas razones, el municipio de Sfax, como institución más cercana a la ciudadanía, reafirma su compromiso con la defensa de los derechos humanos, respalda plenamente esta campaña y se siente honrado de sumarse a ella.
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Por primera vez, el consejo municipal creó una comisión para los derechos humanos y la igualdad de oportunidades entre géneros.
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El municipio de Sfax se comprometió en una campaña para apoyar a los migrantes y refugiados durante la crisis del Covid y respaldó todos los esfuerzos locales para aliviar su sufrimiento.
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El municipio de Sfax está trabajando en coordinación con muchos otros municipios y actores internacionales y locales para formar una fuerza de presión con el fin de establecer una política oficial clara en materia de inmigración y asilo y resolver los problemas que se derivan de ella.