Gwangju

Heredar el legado histórico de Gwangju 

El camino de Gwangju hacia su consolidación como ciudad de derechos humanos se basa en una rica tradición de activismo cívico y resistencia. Este legado incluye el llamado a la igualdad de la Revolución de los Campesinos Donghak de 1894, la lucha por la autodeterminación nacional del Movimiento de Independencia del 1 de marzo de 1919 y la lucha de los Estudiantes de Gwangju de 1929. La defensa de la justicia por parte del Movimiento de Independencia y la defensa de la democracia y la dignidad humana por parte del Movimiento de Democratización 18 de Mayo. Estos hitos han forjado la identidad de Gwangju como ciudad de democracia, derechos humanos y paz, y su firme compromiso con la justicia y la inclusión social.

Transformar el Movimiento por la Democracia en una Ciudad de Derechos Humanos 

Basándose en su legado democrático, Gwangju ha institucionalizado los derechos humanos como principio rector de la gobernanza local. La transición de la ciudad, de la resistencia a una administración proactiva basada en los derechos, garantiza que los valores de participación, justicia y dignidad se integren en las políticas y la vida cotidiana, haciendo de los derechos humanos una realidad para todos los residentes.

Ampliar el Movimiento de Ciudades por los Derechos Humanos hacia una Ciudad Inclusiva 

La visión de ciudad inclusiva de Gwangju implica ampliar los derechos y las oportunidades para todos, independientemente de su origen. Esto se logra atendiendo las necesidades de los grupos marginados, fomentando la diversidad cultural y promoviendo la armonía social, la paz y la justicia. El enfoque de la ciudad garantiza que todos los residentes puedan participar plenamente y beneficiarse de la vida social, cultural y económica de Gwangju.

Integración de la inteligencia artificial para la inclusión y la accesibilidad 

Desde 2021, Gwangju aspira a convertirse en la ciudad líder en IA de Corea del Sur, centrándose en el desarrollo y la integración de tecnologías de IA. Esto incluye el establecimiento de un centro nacional de datos de IA y un centro de demostración. La fase inicial de este proyecto implica una inversión de aproximadamente 300 millones de dólares estadounidenses para impulsar el desarrollo de la IA y 450 millones de dólares estadounidenses adicionales para expandirlo hasta 2029. Estas iniciativas subrayan el compromiso de Gwangju de aprovechar la IA para impulsar el crecimiento económico y el avance tecnológico, además de promocionarse como una ciudad que adopta la inteligencia artificial para promover la inclusión y la accesibilidad en la vida urbana. Dos componentes clave son: 

• IA para la Planificación Urbana Participativa: Las herramientas basadas en IA facilitan una mayor participación ciudadana en la planificación urbana, haciendo que los procesos sean más inclusivos y receptivos. Por ejemplo, la IA puede analizar las aportaciones de la comunidad para diseñar espacios públicos accesibles, garantizando que la diversidad de opiniones influya en el desarrollo urbano. 

• IA para Accesibilidad y Servicios de Asistencia: Las soluciones basadas en IA, como la planificación de rutas accesibles en tiempo real, los semáforos adaptables y la navegación asistida para personas con discapacidad, abordan directamente las barreras a la participación. Estas tecnologías ayudan a garantizar que todos los residentes, incluidas las personas con discapacidad o movilidad reducida, puedan navegar y acceder a los servicios de la ciudad de forma independiente. 

El papel de la IA no es sólo técnico y económico; encarna principios éticos de transparencia, justicia y equidad, alineándose con los valores de derechos humanos de Gwangju y apoyando la toma de decisiones sostenible basada en datos.

Incorporar la cultura como pilar de la inclusión

Gwangju, una de las seis ciudades más grandes de Corea del Sur, destaca como un vibrante centro cultural profundamente arraigado tanto en la tradición como en la innovación, con diversas instituciones culturales, como el Centro Cultural de Asia, cuya construcción costó mil millones de dólares. Su identidad cultural no solo se define por su rico patrimonio artístico, sino también por su compromiso con la inclusión, convirtiendo la cultura en un pilar fundamental para fomentar una comunidad más cohesionada y diversa. 

La cultura es un poderoso motor de inclusión social y resiliencia urbana. El marco de ciudad inclusiva de Gwangju integra la cultura de diversas maneras: 

• Desarrollo Urbano Cultural: Al utilizar la cultura como puente entre comunidades, Gwangju puede reducir la segregación, fomentar la cohesión social y crear espacios compartidos para el diálogo y la interacción. Las iniciativas que promueven el intercambio cultural, el arte público y los eventos comunitarios ayudan a fortalecer el tejido social de la ciudad y a celebrar su diversidad. 

• Derechos e identidad cultural: Garantizar que todos los residentes puedan acceder, participar y contribuir a la vida cultural de la ciudad reafirma su sentido de pertenencia e identidad. Preservar el patrimonio local, apoyar las industrias creativas e involucrar a artistas y actores culturales en la planificación urbana empodera a los grupos marginados y refuerza la apropiación comunitaria de los espacios públicos. Un ejemplo es el sistema de vales culturales, cuyo objetivo es ayudar a todos los ciudadanos a disfrutar del arte y la cultura, a la vez que se apoyan las actividades creativas de artistas profesionales.

Orientar una gobernanza sostenible y responsable con la participación de la sociedad civil 

El modelo de gobernanza de Gwangju es participativo y transparente, e involucra a la sociedad civil a través del Comité Ciudadano para la Promoción de los Derechos Humanos y el Comité de Gobernanza Ciudadana. Estos organismos garantizan que las políticas de derechos humanos, inteligencia artificial y cultura se orienten desde diversas perspectivas, se monitoreen para determinar su impacto y se mejoren continuamente en colaboración con la comunidad.

Conclusión 

El papel esencial de Gwangju en la promoción, el cumplimiento y el respeto de los derechos humanos se basa en su legado histórico, su gobernanza innovadora y su compromiso con los valores universales. Al integrar la inteligencia artificial y la cultura como pilares de la inclusión, Gwangju empodera a las personas, fomenta la armonía social y garantiza un desarrollo responsable y sostenible. Como "ciudad de los derechos humanos", Gwangju no solo honra su pasado, sino que también lidera el camino para las ciudades de todo el mundo que buscan hacer de los derechos humanos, la innovación tecnológica y la vitalidad cultural una forma de vida.