21/12/2015

Llamada a ciudades y gobiernos locales comprometidos contra los Paraísos Fiscales

 

 

Esta llamada está apoyada por políticos locales que quieren poner fin a la evasión y la elusión fiscales. El manifiesto está disponible en diferentes lenguas. Aquí también pueden encontrar documentos relevantes sobre paraísos fiscales y decisiones de gobiernos locales y regionales de diferentes países.

 

Los impuestos son una necesidad esencial para el sostenimiento de nuestro bienestar y las infraestructuras comunes. Nuestro mandato como políticos locales elegidos es asumir la responsabilidad del dinero que pagan los ciudadanos en impuestos. Por desgracia, este mandato se ha vuelto cada vez más difícil de realizar, ya que el bienestar financiado por los impuestos se ve amenazado por aquellos que usan lagunas en la ley con el fin de eludir y/o evadir el pago de impuestos.

Las corporaciones multinacionales han ido desarrollando múltiples sistemas a través de diversas operaciones de maquillaje contable para transferir sus ganancias a paraísos fiscales.

Mientras que los municipios, las regiones y las naciones son castigados por la crisis económica, los paraísos fiscales están siendo inundados por el dinero. Un total de entre 21 y 32 billones de dólares se ocultan en los paraísos fiscales.

Debido a la evasión fiscal y la elusión de impuestos, la Unión Europea pierde 1 billón de Euros cada año, lo que representa más que el gasto sanitario total de todos los Estados de la UE juntos. La pérdida de los ingresos fiscales en los países pobres excede el total anual mundial destinado a la ayuda al desarrollo. Esta evasión fiscal generalizada sólo puede generarse y mantenerse porque las instituciones gubernamentales no  alcanzan a controlar la economía globalizada. 

Si las fortunas ocultas en los paraísos fiscales fuesen gravadas adecuadamente, habría un montón de recursos para la inversión en servicios sociales, en solidaridad internacional y en una transición hacia una economía sostenible desde el punto de vista ecológico que podría protegernos del cambio climático. Todos nos beneficiamos de vivir en una sociedad civilizada con infraestructuras y un bienestar común financiado a través de los impuestos. Por lo tanto, todos debemos contribuir y pagar la parte correspondiente. Eso sirve también para las mayores empresas y bancos. 

Debido a la presión de los movimientos sociales y otras organizaciones de la sociedad civil, el tema de la evasión fiscal a través de los paraísos fiscales está ahora en la agenda de la UE, de la OECD, del G8 y del G20, pero alcanzar nuevos acuerdos globales lleva su tiempo.

Es por ello que, como políticos locales electos en representación de nuestra ciudadanía queremos asegurarnos de que el dinero de los contribuyentes no pueda ir a parar en modo alguno a cualesquiera empresas, bancos o fondos de inversión que utilicen los paraísos fiscales para evadir impuestos. Por ejemplo, recuperando los servicios que puedan prestar al control en manos públicas o mediante la exigencia de información detallada país por país, para verificar que las empresas que optan a participar en concursos para contratos públicos pagan los impuestos adecuados en todos los países en lo que operan. Desde el año 2010, diversas regiones francesas han comenzado a exigir más transparencia en las cuentas de los bancos con los que están trabajando. En Suecia, Noruega y Finlandia algunos municipios están imponiendo fuertes medidas hacia una mayor transparencia y responsabilidad fiscal en la gestión de sus licitaciones públicas.

Los gobiernos locales que exigen a los participantes en la contratación pública la “no utilización” de paraísos fiscales, creen que esa exigencia está en consonancia con la intención de la ley de preservar la ética de los negocios, la transparencia y la igualdad de trato. Las empresas que utilizan los paraísos fiscales con el fin de evitar el pago íntegro de sus impuestos pueden presentar ofertas más bajas, lo que es contrario al principio de que todos los proveedores deben tener igualdad de oportunidades.

Es injusto para los honestos propietarios de pequeños negocios y crea una distorsión en el mercado.

A través de decisiones democráticas podemos promover la Justicia Fiscal. Queremos alcanzar:

  • La cooperación y la transparencia en lugar del secreto de los paraísos fiscales, el maquillaje contable y la ingeniería financiera de las empresas y la competencia fiscal entre los distintos países.
  • Un registro público de los verdaderos propietarios de las empresas, incluyendo todas las estructuras en la sombra como los trusts corporativos, fideicomisos, fundaciones privadas y empresas tapadera.
  • Un acuerdo mundial sobre el intercambio automático de información entre las autoridades fiscales.
  • Informe país por país de las corporaciones multinacionales de todos los sectores en los que operan mostrando sus actividades financieras, de modo que sean visibles sus estrategias fiscales.

Instamos a los políticos a nivel nacional e internacional para que presionen por un nuevo marco internacional que pueda garantizar la sangre vital de nuestras comunidades – es decir los ingresos de un régimen tributario equitativo.

Los gobiernos locales en todos los países pueden cooperar y utilizar mejor las posibilidades disponibles hoy para estar ”libres de paraísos fiscales”, es decir, para impedir que el dinero de los contribuyentes vaya a las empresas por cualquier vía a los bancos o instituciones financieras que utilizan paraísos fiscales para la evasión de impuestos.

 

 

- Fuente: Tax Haven Free